La berza normalmente lisa y a veces rizada es una verdura de la familia de la col, que en un principio da sentido local a una frutería. Hoy se está poniéndose de moda la variedad de berza rizada llamada Kale, así es denominada en Estados Unidos de donde viene con fuerza dicha moda.
La frutería El Vergel Cántabro dispone habitualmente de berzas por ser uno de los ingredientes básicos de platos tradicionales del norte de la península; en Cantabria el Cocido Montañés, en Asturias el Pote Asturiano. La berza se puede encontrar casi todo el año, aunque es más difícil en verano. Es en el invierno y la primavera cuando está más presente.
Al cocinarla es conveniente no hacerlo durante mucho tiempo, no más de 5 minutos, para ello cortarla en trozos pequeños a modo de juliana. La berza, un alimento tan humilde en la cocina rural, encierra destacadas cualidades saludables. El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) a través de la Misión Biológica de Galicia (MBG) se ha constatado el alto valor antioxidante de las berzas, superior incluso al del brécol, el repollo y la coliflor.
Las berzas según Pilar Soenjas, investigadora principal del proyecto y científica del CSIC en el Grupo de Genética y Mejora de Básicas de la MBG "ayuda a proteger el organismo del daño oxidativo (envejecimiento celular, patologías cardiovasculares, asma, alergias, enfermedades neurodegenerativas...) que causa la acumulación excesiva de radicales libres en las células, producido por la respiración mitocondrial en los organismos aerobios". Además, la berza contiene importantes aportes en vitamina C., en minerales como calcio, sílice, magnesio, hierro y potasio. El potasio la hace una de las verduras más diuréticas y contiene una significativa cantidad de fibra.