La avellana tostada es un aperitivo exquisito, una “golosina” de la naturaleza que mantiene casi todas sus cualidades saludables.
La avellana tostada tiene un tueste excelente y la cascara semi cascada o abierta, para conservar al máximo sus propiedades. Las avellanas que ofrece la frutería EL vergel Cántabro tienen estas características.
La avellana al tostarse intensifica su sabor y su aroma, provocando que pierda parte de la humedad y creando una textura crujiente y una coloración dorada clara, obtenida gracias a sus grasas naturales. El buen tueste significa ausencia de amargura y quemazón por el exceso de calor.
La avellana es originaria de Asia Menor, y es introducido su cultivo en España en el S. XIX, convirtiéndose varios lugares en zonas donde las cuales dicho producto tiene su denominación de origen. Necesitan de un clima templado a la vez que húmedo para desarrollarse sin problemas. La frutería EL Vergel Cántabro dispone todo el año de avellanas con cascara natural.
Este fruto seco que puede ser para muchos niños como una golosina, un aperitivo o tentempié para los mayores, ofrece muchas más posibilidades culinarias. Va muy bien en ensaladas, salsas, verduras, en las sopas e incluso en arroces o guisos, como sin ninguna duda en múltiples postres y repostería. Las avellanas son uno de los frutos secos más ricos que conocemos y relativamente fácil de incorporar en todo tipo de comidas, ya sean dulces o saladas.
Algunas de las propiedades de la avellana, que la convierten en un gran fruto seco saludable, son las siguientes: las grasas mono insaturadas, principalmente ácido oleico, y poliinsaturadas, lo que da a la avellana un potencial efecto de protección cardiaca. Destaca por su contenido en vitamina E, magnesio, fibra, calcio, vitamina B, vitamina B6, vitamina B9, fósforo, hierro, zinc, hidratos de carbono y proteínas. Las avellanas no tienen colesterol. Su proteína vegetal es de muy buena calidad, contienen una elevada proporción de arginina, y aportan energía física al organismo y agilidad mental al cerebro. También dispone de potasio en cantidades relevantes, por lo que es ideal para controlar la hipertensión arterial.