Un suelo y clima excelente y apropiado producen un arándano excelente para darnos sus mejores propiedades saludables.
El arándano es un fruto bien conocido entre la gente de la montaña Cántabra, todos recuerdan su sabor mientras estaban ocupados al aire libre. Hemos pasado de estas imágenes casi bucólicas, y por tanto de poca valoración económica para nuestras personas mayores, a una apuesta para muchos jóvenes por vivir del campo. La franja costera Cantábrica tiene grandes posibilidades para el cultivo de este fruto, por sus suelos fértiles y su clima húmedo y templado. Todo esto permite producir arándanos de gran calidad. Hoy podemos decir que ya está aquí este maravilloso producto y a nuestro alcance en la frutería El Vergel Cántabro, durante su temporada en los meses finales del verano.
El arándano es un arbusto originario de las zonas septentrionales de Europa, Norteamérica y Asia, donde crece en los sotobosques de montaña. Una baya, un fruto rojo, típico de USA y Europa del norte.
Parece que no hay fin en los estudios, especialmente americanos, sobre el arándano y sus excelentes noticias saludables.
Empezaremos destacando los componentes que le dan su color azulado, las antocianinas. Investigaciones de la Universidad de Clemson y del Departamento de Agricultura de Estados Unidos han colocado al arándano en la posición número uno por su capacidad antioxidante, con relación al resto de los frutos y vegetales.
Algunas de las propiedades de los arándanos parecen beneficiar sobre todo al cerebro. Varios estudios indican que su consumo habitual hace más lento el declive cognitivo asociado al Alzheimer y otras enfermedades degenerativas. En aliciente, una indicación tradicional del arándano que los estudios científicos han confirmado es la prevención y el tratamiento de infecciones urinarias y digestivas.
Otros estudios señalan su eficacia para bajar la hipertensión, reducir los triglicéridos, aumentar el colesterol «bueno» y prevenir la oxidación del «malo». Estos efectos ayudan a prevenir las enfermedades circulatorias (varices, trombos…) y del corazón. Por otro lado, investigaciones de laboratorio indican que los arándanos pueden prevenir y mejorar la degeneración macular y otros problemas de ojos.
Contiene altas cantidades de "quercetin", famoso por reducir el riesgo de cáncer de próstata, colon y seno. Parecen infinitos los beneficios de esta fruta; tantos como la cantidad de estudios que hay sobre ella.
Este arándano tan saludable ha demostrado una gran capacidad de creatividad y versatilidad en la cocina, sobre todo en postres (tanto fríos como calientes), en salsas, en ingrediente para rellenar carnes, y como un elemento fabuloso en miles de ensaladas.