Mango nacional

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El mango nacional permite disfrutar de su abundancia, calidad óptima y ensoñación tropical. 

El mango nacional ha traído a la costa de la península ibérica la abundancia de una fruta deliciosa. El mango es dulce, jugoso parece un melocotón tropical tanto en el aspecto como la textura una vez madura. Un fruto realmente capaz de completar y saciar el paladar más exigente de experiencias. Capaz de dejar nutrido cada fibra del organismo.

El mango nacional básicamente proviene de la llamada costa tropical, provincia de Granada y Málaga. Una fruta tropical que esta zona lo lleva cultivando poco más de 30 años.

 La frutería El Vergel Cántabro ha ido incorporando está fruta desde casi el principio, al darse cuenta de sus grandes ventajas. La maduración es mejor, se lleva acabo más tiempo en el árbol y con la modernización de las redes de comunicación terrestres el transporte se puede considerar inmediato. Por ello no hacen falta cámaras de frio para su conservación. La calidad del producto cada año es mejor, por la destreza y experiencia que van adquiriendo los agricultores, y por la mejora de las variedades que se van desarrollando.

Ahora mismo podemos encontrarnos con cuatro variedades de mangos cultivadas en esta costa tropical española: la variedad Osteen, la mayoritaria, la Keitt, la Kent y la Tommy Atkins. Nosotros apostamos por las menos fibrosas al igual que con el mango de importación.

La variedad de Mango Osteen es la variedad que en la frutería seleccionamos preferentemente por varios motivos; La carne es ligera, de moderada firmeza, suave, muy dulce, no tiene fibras y le acompaña un excelente e intenso aroma. Cuando alcanza su punto adecuado de madurez se encuentra con un llamativo color rojo-anaranjado con ligeros toques carmesí en la parte superior, pero en la base es verde. El mango de la variedad Osteen proviene de una semilla plantada en 1935 en la propiedad S.A. Osteen, en Florida, reproducida a partir de semillas de mango Haden.

La variedad de mango Keitt dispone de una pulpa con poca fibrosidad, jugosa y firme. El sabor tiene una marcada acidez, con menos azúcar y menos aroma que otras variedades. El color es rosado en esta zona de producción haciéndolo muy atractivo, a diferencia del resto de países productores, donde su color es verde. La forma es ovalada, el tamaño mediano. La piel es gruesa, no comestible y muy resistente a los daños por moverse, lo que hace una variedad ideal para el transporte. Su época de maduración va de finales de octubre a diciembre.

La variedad de mango Kent es de color rojo y amarillo cuando madura. La forma es ovalada orbicular, es de grato sabor, dulce, jugoso y con poca fibrosidad. El peso medio que tiene podemos catalogarlo de mediano, al rondar los 470 gramos. La época de su maduración está entre octubre y noviembre.

La última variedad de mango es el Tommy Atkins. Una de las variedades con más tiempo de cultivo en la zona y por ello ampliamente extendida. Hoy en día está haciendo el proceso inverso o de reducción. La variedad de mango Tommy Atkins es de tamaño grande (600 gr.) y con forma oblonga, oval. La piel es roja y de alta resistencia a daños con los movimientos por lo que es muy valorado en el transporte. Dispone de un alto contenido en ácidos orgánicos. Sobresale su capacidad de conservación por un periodo largo. No dispone de las mejores características en cuanto a sabor y aroma.

 

              ALGUNAS CONSIDERACIONES GENERALES DEL MANGO

El mango es nativo de la India, probablemente el ser humano lo cultiva desde hace más de 4000 años. La India todavía hoy dispone de selvas de mangos silvestres, y es la zona de cultivo principal de esta planta. Los mangos hoy en día están extendidos en casi todas las áreas tropicales.

El mango se ha convertido en el tercer fruto tropical en términos de producción e importación en el mundo. Cada vez somos más conscientes que en España se producen mangos excelentes, tanto en Canarias como en la llamada Costa Tropical andaluza, entre Málaga y Granada.

Los cultivos de mangos suelen agruparse en 3 grupos principales que a su vez incluyen importantes variedades y desarrollo de nuevas:

Los mangos del grupo indio. Señalar que la longitud de las fibras y el color de la piel son muy variables, el color va de roja a muy roja. La mayoría son dulces con un contenido bajo en ácidos.

Los mangos del grupo Indochinos y filipinos. Son muy dulces, sin fibra lo que les hace muy apreciados. La piel es verde amarillenta. El Carabao, más conocido como la variedad Manila, es el cultivado más importante de Filipinas, también lo es en México.

El mango del grupo de Florida. Las variedades que se desarrollaron en Florida básicamente se desarrollaron a partir de las semillas provenientes del mango Mulgoba en 1910. Las variedades que se crearon son de piel con color rojo y alta resistencia, lo cual es muy importante para su transporte, y contienen una cantidad de ácidos orgánicos alto. De similares características son también las variedades cultivadas en España; Tommy Atkins, Osteen y Keitt.

Pese a todo lo dicho que es una forma técnica de clasificar los mangos, a nosotros nos gusta clasificarlos en dos grupos; los que tienen fibra y los que no. Apostando mayoritariamente por los que no, pues permiten no solo utilizarse para zumo sino también para comerlo en lonchas o troceados.

El mango es también conocido como "melocotón de los trópicos" por su anaranjado color y agradable sabor. Cuando el fruto está maduro se percibe, al ser presionado con los dedos, que cede fácilmente, si antes no lo hemos descubierto por su olor intenso y característico.

                          CUALIDADES SALUDABLES

El mango como la mayoría de las frutas es muy rico en agua y bajo en proteínas y grasas. El aporte calórico proviene casi exclusivamente de sus hidratos de carbono, que son en su mayoría azúcares naturales de fácil digestión.

El mayor tesoro o cualidades saludables que tienen los mangos son las vitaminas, en concreto las tres vitaminas antioxidantes, A, C y E. Las cantidades que contienen de vitamina C son excepcionales. El mango también es una fuente excelente de vitamina E, al tener por 200 g de fruta un 23% de la cantidad diaria necesaria para un adulto. Los mangos permiten obtener vitaminas A y C a aquellas personas que no toleran los cítricos, el pimiento u otros vegetales, que son fuente casi exclusiva de vitamina C y A en nuestra alimentación. Estudios epidemiológicos indican que el cáncer de estómago es menos frecuente en aquellas personas cuya dieta es rica en vitamina C.

El mango es una fruta con gran capacidad antioxidante al proporcionar cantidades significativas de los tres nutrientes antirradicales libres más importantes; las vitaminas C y E que ya hemos señalado y el betacaroteno. Esta capacidad antioxidante ayuda a prevenir en general enfermedades degenerativas y especialmente los problemas cardiacos, el cáncer y la diabetes.

En cuanto a los minerales que tienen los mangos, destacar el potasio y el magnesio, y también aportan pequeños contenidos de hierro, fósforo y calcio. Esta fruta contiene fibra soluble (pectinas) ácidos orgánicos (cítrico y málico) y taninos.

Los mangos son ricos en fitoquímicos con propiedades que ayudan a reducir la incidencia del cáncer. Entre éstos fitoquímicos se encuentra la luteína. La luteína se concentra en una región específica del ojo, el macular, por ello dosis elevadas puede proteger contra procesos degenerativos de la edad, en este órgano.                          

                         EN LA COCINA

Los mangos generalmente suelen consumirse como una fruta fresca tal cual pelada. Pero de este modo en muy común utilizarlo en macedonias, con yogur, cereales, queso fresco y cada vez más en sorprendentes ensaladas. En los países con larga tradición en su cultivo sus posibilidades son mucho más amplias; se elaboran canelones, lasañas o milhojas y permite técnicas culinarias variadas: purés, espumas, mouses, sorbetes, zumos, salteados, asados, guisos, revueltos o fritos en tempura. En estos países de origen, es habitual consumirlo cocinado como verdura, principalmente cuando se trata de mangos verdes.

                       FORMA DE CONSUMO

El color del mango no es el mejor indicador de su madurez, algunas variantes muy buenas permanecen siempre verdes. Para elegir un mango maduro, escoja uno que esté ligeramente blando al apretarlo y que desprenda un fuerte aroma.

Para acelerar el proceso de maduración sólo tiene que dejar el mango junto a otras frutas diferentes.

Para servirlo, hay que cortar el mango en tres trozos. El mango tiene una semilla plana en el centro, por lo que hay que hacer dos cortes a lo largo y paralelo de las caras más planas del mango, intentando que queden a cada lado de la semilla.

 

Después, realice una serie de pequeños cortes a lo largo y ancho de la pulpa, como si fuese un damero, con cuidado de no cortar la piel. Sujete esa mitad del mango por la parte inferior y apriete con los dedos hasta que la piel se vuelva cóncava en lugar de convexa, de forma que los dados de pulpa se abran hacia el exterior. Así podrá comerlo fácilmente con una cuchara.

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